Por Cristian Flores
Se cumplen dos años desde que Lorena Cuéllar Cisneros llegó al poder, siendo la segunda gobernadora de Tlaxcala, incluso la más votada; sin embargo, su mandato a pasado a ser una administración fallida, misma que se ha visto involucrada en corrupción, favoritismo, impunidad y represión.
Sin duda, el Lorenato ha hecho alusión a lo que Nicolás Maquiavelo decía: ‘en la política, hay que tener habilidad para fingir, y disimular, para parecer manso, fiel humano religioso y leal a la sociedad’, y eso fue lo que llevó a Lorena Cuellar Cisneros a ganar con más de 300 mil votos en Tlaxcala; simulando ser una aliada del ‘pueblo bueno y sabio’.
Se sabe que Lorena Cuéllar Cisneros no es una mujer que venga del pueblo, pues viene de una familia que siempre estuvo en el Poder y mucho menos, que haya luchado junto al caudillo Andrés Manuel López Obrador, ya que nunca se le vio caminar a lado del actual presidente y menos se le vio durmiendo en los plantones que López Obrador realizaba en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México; ella solo fue una arropada al movimiento para seguir en la política.
Lo que le falto es que, en la política, como también decía Maquiavelo, es que ‘para conocer bien la naturaleza de un pueblo hay que ser príncipe y para conocer la de los príncipes hay que pertenecer al pueblo’, Lorena no pertenece al pueblo, pertenece a una cúpula, es la heredera de un clan; no sabe lo que realmente es la necesidad de los tlaxcaltecas.
Aún faltan 4 años para que el Lorenato termine la ‘Nueva Historia’ que dio comienzo el 1 de septiembre de 2021. Veremos que nos espera de un gobierno, el cual no predica con los principios de la Cuarta Transformación. Mientras tanto, Lorena seguirá llenándose la boca diciendo que en Tlaxcala no pasa nada, y que la entidad seguirá siendo el estado más seguro del país.
Carta abierta…
El pasado jueves 31 de agosto, la senadora tlaxcalteca por Morena, Ana Lilia Rivera Rivera fue elegida con 32 votos a favor como la nueva presidenta de la Mesa Directiva del Senado de la República; eso la convierte en la primera tlaxcalteca en presidir el Senado.
Tras su llegada a la mesa, en redes sociales morenistas y de otros partidos felicitaron a Ana Lilia Rivera; sin embargo, se vio la ausencia del dirigente estatal de Morena, el ex priista Carlos Augusto Pérez Hernández, quien no felicitó a la senadora por su nuevo cargo.
¿Será que desde Palacio de Gobierno existe la orden de excluir a través de la dirigencia estatal de Morena a los que realmente estuvieron en la lucha con López Obrador?
Lo que es cierto es que Ana Lilia Rivera siempre estuvo en la lucha a lado del Presidente Andrés Manuel López Obrador; sin embargo, los paladines de Lorena Cuellar Cisneros, dicen que la senadora no es digna de estar en Morena por su manera de pensar.
Un juego más…
Los regidores de los diferentes ayuntamientos del estado no siempre están al servicio de sus ciudadanos, pues algunos solo están como maniquíes desde una oficina, gozando del dinero que desvían del erario público; no cumplen con la responsabilidad que tienen como servidores del pueblo.
Al momento nos hemos percatado del trabajo que han realizado dos jóvenes regidores: el primer regidor de Contla, Gilberto Flores Maldonado y la panista, Mirza Amaral Sánchez del Ayuntamiento de Tlaxcala. Ellos, han destacado como los únicos regidores que trabajan en beneficio de sus ciudadanos, pues basta con ver en sus redes sociales, la cantidad de apoyos que han brindado a sus pobladores.
Sin duda, Gil Flores y Mirza Amaral tendrán futuro en la política, al grado de convertirse en los futuros en alcaldes de su municipio.
Las opiniones vertidas en este espacio son responsabilidad de su autor(a) y no reflejan necesariamente la postura editorial de este medio de información.