La legendaria actriz y ex senadora busca reconocimiento destacado por su trayectoria excepcional
Ciudad de México: En una ceremonia íntima realizada en el hogar de la reconocida actriz Silvia Pinal, se le otorgó un destacado reconocimiento por su invaluable aporte a la cultura mexicana. En este sentido, su hija Sylvia Pasquel está impulsando activamente la propuesta para que se le conceda la medalla de honor Belisario Domínguez.
Este reconocimiento es considerado uno de los más importantes en México y se otorga a aquellos individuos que han realizado contribuciones significativas en beneficio del país y de la sociedad en general.
Con esta iniciativa, se busca honrar y resaltar la trayectoria excepcional de la legendaria actriz, así como su impacto perdurable en el ámbito cultural de México. Sin embargo, la actriz reveló que se quedó con ganas de tener un cargo más importante dentro de la política mexicana, más allá de haber sido senadora y diputada en México.
Silvia Pinal, la reconocida diva del cine mexicano, ha sido honrada recientemente con las ‘Alas de Cuauhtémoc’ por su destacada trayectoria en el ámbito político a lo largo de varios años.
Aunque es ampliamente conocida por su brillante carrera en la actuación, pocas personas sabían que la actriz también tenía aspiraciones de ocupar cargos más altos en el ámbito político, incluso habiendo sido senadora y diputada en México.
Durante una entrevista con ‘Venga la Alegría’, a la actriz se le preguntó si nunca le pasó por la cabeza llegar a ser Presidenta de México, a lo que Silvia Pinal respondió que sí, porque le parece un puesto mucho más importante.
“Sí, ¿por qué no?, pues todos sabemos lo que es (la política), pero cuando lo vive es mucho más importante”, reveló. “Pues saben de dónde sale, a dónde van, a dónde quieren llegar porque sí, porque no, o sea, no, eso es la política, es una cosa muy linda”, dijo.
Silvia Pinal se destaca como una de las pioneras en la industria del entretenimiento al adentrarse plenamente en la política mexicana. Este camino se inició a raíz de su matrimonio con Tulio Hernández, su cuarto esposo, quien ocupó el cargo de gobernador de Tlaxcala de 1981 a 1987.
Como resultado de esta unión, Silvia se convirtió en Primera Dama del Estado y asumió la presidencia del DIF estatal. Fue en ese momento cuando la política captó su interés, y Silvia se unió al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Durante su afiliación al partido, ocupó diversos cargos destacados. En 1991, se convirtió en diputada federal, posteriormente fungió como senadora y también participó activamente en la Asamblea del Distrito Federal. Durante su participación en la política, destaque por su compromiso en la promoción de eventos cultura.