Cabe destacar que se convertiría en la primera condena de ese tipo, desde que iniciaron las protestas en el mes de septiembre, tras la muerte de Mahsa Amini, quien fue detenida por la policía de la moral, presuntamente por no llevar correctamente el velo
Una persona acusada de participar en disturbios, fue condenada a muerte por un Tribunal de Teherán, convirtiéndose en la primera condena de este tipo desde que inició la ola de manifestaciones en el país.
Esta información la reveló la Agencia Mizan Online de la autoridad judicial, sin embargo, se dieron detalles sobre su identidad o edad del condenado.
Según el veredicto, dicha persona fue declarada “enemiga de Dios” y culpable de “incendiar un edificio gubernamental, alterar el orden público, reunirse y conspirar para cometer un crimen contra la seguridad nacional”, dijo la agencia.
Además, otro Tribunal de la capital condenó a cinco personas a penas de entre cinco y diez años de prisión por “reunirse y conspirar para cometer delitos contra la seguridad nacional y alterar el orden público”. No obstante, se trata de tribunales de primera instancia, por lo que los condenados pueden apelar.
Cabe destacar que Irán vive una ola de violencia desde que Mahsa Amini, una kurda iraní de 22 años de edad, murió el pasado mes de septiembre tras ser detenida por la policía de la moral, presuntamente por no llevar correctamente el velo tal y como exige el estricto código de vestimenta para las mujeres en la República Islámica.
La justicia iraní también ha acusado a cerca de 800 personas por su participación en los “recientes disturbios” ocurridos en las provincias de Hormozgán, Isfahán y Markazi.
Cabe hacer mención que más de 2 mil personas han sido acusadas, la mitad de ellas en Teherán, desde que comenzaron las protestas hace dos meses, según las cifras del Poder Judicial iraní.
Finalmente, de acuerdo con Mahmood Amiry-Moghaddam, Director de la ONG Iran Human Rights (IHR), con sede en Noruega, al menos 20 personas se enfrentan a cargos que conllevan la pena de muerte.
“Nos preocupa mucho que las ejecuciones se lleven a cabo de forma precipitada”, reconoció Amiry-Moghaddam.
