Una cosa no quita la otra. El que Shakira y Gerard Piqué ya no sean pareja no significa que no se preocupen por su bienestar.
Esta semana, el futbolista se convertía en noticia, una vez más, por ir a visitar al que fuera su suegro, William Mebarak, en el hospital Teknon-Quirón de Barcelona, en el que se encuentra actualmente ingresado.
A pesar de toda la polémica creada alrededor de la expareja, han sabido separar los asuntos personales ante una circunstancia tan delicada.
Este domingo era la madre de la artista, Nidia del Carmen Ripoll quien, siempre con una sonrisa en los labios y gran amabilidad con los periodistas, les sorprendía con estas declaraciones sobre su exyerno.
Primero los reporteros la preguntaron si Shakira había visitado a su padre este día, a lo que contestó con un sí rotundo. La cantante no falta en las visitas diarias a su progenitor, de quien está pendiente en cada momento.
La siguiente pregunta, casi obligada, era sobre Piqué y la visita que hizo a su esposo. Ante la insistencia de los paparazzi, Nidia respondió así.
“Claro, sí. Seguimos siendo familia”, replicó dejando claro que las tensiones de los últimos meses no borran la unión de más de una década.
La mamá de Shakira también confirmó a los medios españoles que el estado de salud de su marido, de 91 años, sigue siendo “estable”.
La intérprete de “Monotonía” presumía el amor de sus progenitores en redes estos días con una foto de ambos dándose un beso en los labios en el hospital.
“Amor verdadero”, escribía la colombiana con profunda admiración.