Por: Giillermo Bernal Arcos
El día de hoy, en torno a lo que aún es el reconocimiento como presidente, y la toma de poder, en un acto solemne, conocido como la “ceremonia de Salutación de las Fuerzas Armadas”, el ya presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, asistió como comandante supremo, a este evento realizado ante más de 2000 efectivos de las fuerzas armadas y los agregados militares de distintos países, en el campo Marte de la Ciudad de México.
“Es la más grande muestra de respeto, subordinación y lealtad a la institución que representa, así como de acatamiento a la voluntad popular que lo eligió democráticamente”, fue lo que aseguraba un folleto que se repartió el día de hoy entre los asistentes. Más allá del protocolo, el mensaje que dio el comandante supremo hacia los miembros castrenses fue de admiración, compromiso, reconocimiento y lealtad hacia la nación.
“Este es un ejército patriota. Por eso les convoco en mi carácter de Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas a que todos logremos combatir el problema de la inseguridad y la violencia y se disipen las dudas que tienen que ver con medidas autoritarias represivas. Esta es una gran institución y tiene escuelas para formar a sus integrantes”
Después de este mensaje por parte de AMLO, y dar las futuras ordenes de lo que será la nueva estrategia de seguridad y el nuevo organismo, conocido como “Guardia nacional” que dispondrá de elementos castrenses como de la policía federal, hay algo que aún inquieta en algunos miembros castrenses, expertos en el tema y elementos en la población en general, ha sido el cambio de actitudes y opiniones por parte del actual presidente, que durante sus años de campaña, en más de una ocasión, cuestiono, critico y acuso a las fuerzas armadas, en especial al ejército mexicano, de distintos actos, como el caso Ayotzinapa.
Son varias las ocasiones que lo hizo, aquí una pequeña lista:
- El 7 de octubre de 2016, AMLO escribió en Twitter que el robo de trenes en León “es por necesidad” y que “en vez de acabar con la corrupción y combatir la pobreza mandan mil soldados a Irapuato para enfrentar (criminales”).
- El 9 de febrero de 2017, de gira por Nayarit, el tabasqueño mintió y acusó sin fundamento alguno, que la Marina había masacrado a menores de edad en un operativo contra bandas criminales. Cuando le desmintieron el hecho, fue encarado por periodistas, diciendo en forma evasiva que habían menores de treinta años y que él no se equivoco. En dicho operativo fue abatido el líder del Cártel de los Beltrán Leyva, Juan Francisco Padrón, alías “El H-2”.
- En marzo del mismo año, en Nueva York, López culpó al Ejército de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa cuando un padre le reclamó sus vínculos con el ex alcalde Iguala, él ahora preso, José Luis Abarca.
- Durante su ultima campaña, fueron varias las declaraciones en contra. Uno de ellos fue cuando comparó a los ladrones de combustible, los conocidos como “huachicoleros”, con los soldados y arremetió contra el Ejército por acribillar a “sus hermanos”.
- También la propuesta que dio de amnistía como solución a la inseguridad que azota el país, lo que causo reacciones negativas, principalmente por los entonces secretarios de la Defensa Nacional y Marina-Armada de México, que calificaron la propuesta como una “locura”.
Estos antecedentes, crearon una atmosfera de incertidumbre en el medio castrense, donde no había seguridad sobre el futuro trato del comandante supremo hacia ellos, incertidumbre que creció cuando propuso la “Guardia Nacional”, donde proponía la incorporación de las dos fuerzas castrenses (ejército y marina), junto con la policía federal, con el argumento de que así no servían, y que la defensa del país en caso guerra, sería por parte del pueblo, lo que suponía una desaparición del ejército y marina, disfrazado de transformación.
La construcción de un aeropuerto civil en la principal base aérea militar del país, base que es sede de varias escuelas tanto militares y civiles, unidades habitacionales para las familias de los militares, con plazas comerciales, hospitales y otros servicios, donde el futuro de la base, hasta el momento, fue decidida por una supuesta “consulta ciudadana” que por más ya se sabe, cual fue el resultado. Sin embargo y a pesar de todo lo anterior, los soldados y marinos mexicanos se han malacostumbrado, de cierta forma, a recibir criticas y acusaciones de todo tipo, a vivir en condiciones y circunstancias complicadas, a trabajar más de 6, 10, 20 horas sin descansar, sin poder avisar a sus familias que están bien y no ver a sus seres queridos en lapsos largos de tiempo, con la posibilidad de quizás nunca volver a verlos, y todo por servir a la patria. A pesar de todo esto y de estas decisiones, “SE ESTÁ PARA LO QUE SE ORDENE”.
No importa quien sea ahora el comandante supremo, la lealtad que se le tiene a él y al pueblo mexicano es infinita e incuestionable. El evento de hoy fue producto de reuniones previas, donde se tuvo que aclarar lo que si es posible y lo que no, donde se demostró que las instituciones castrenses son las mas confiables por la población, y que ser parte de las fuerzas armadas es símbolo de admiración y respeto.
Todo esto hoy fue reconocido por el presidente de la republica, la grandeza de las fuerzas armadas que será reforzada y el compromiso que hay con el pueblo de México. Hoy fue una reconciliación, hoy quedo claro lo importante que son las fuerzas armadas para el país, y que este trabajo de los miles de soldados y marinos, es por una causa justa y honrosa, México.