Por los malos resultados en la elección del pasado 6 de junio, las dirigencias del PRI, PAN y PRD, tres de las principales fuerzas políticas que conformaron la coalición “Unidos por Tlaxcala”, no la pasan nada bien por los constantes reclamos, reproches y señalamientos de militantes y simpatizantes, aunque digan lo contrario.
Por supuestas decisiones equivocadas en la designación de candidaturas y por errores cometidos durante la campaña a la gubernatura, diputaciones federales, locales, alcaldías y presidencias de comunidad se encienden los focos rojos de alarma en estos institutos, y es que nos dicen que grupos de militantes se organizan para exigir de manera pública a los dirigentes estatales Noé Rodríguez Roldán, José Gilberto Temoltzin Martínez y Julio César Pérez cuentas claras de lo ocurrido durante el proceso electoral, es decir, la presentación de sendos informes completos de lo que se hizo y falto por hacer.
Inconformes con los resultados electorales de una coalición con estas características exigen que sus dirigencias enfrenten las consecuencias de perder, es decir que reconozcan sus fallas y debilidades por falta de comunicación, sincronía, empatía y compromiso, asimismo, admitan que les costó o no encontraron la fórmula para derrotar a Morena y a sus aliados, o por lo menos la estrategia para equilibrar la votación final.
Lo cierto es que el PRD, PAN y PRI perdieron espacios representativos de poder, peso y fuerza en el gobierno, Congreso local y presidencias municipales, se conformaron con las migajas que dejaron los de Morena y sus aliados; los tres penden de un hilo, es decir, de las curules plurinominales y la de sus aliados, no más.
Antes de que estalle la bomba al interior de lo que fue la coalición “Unidos por Tlaxcala”, sería sano que los líderes se acerquen a sus militancias y mediante sendos informes o en uno general detallen las causas que les impidieron ser competitivos, es más, informar si seguirán firmes y unidos para lo que viene, en virtud de que la gobernadora electa Lorena Cuéllar Cisneros traerá la espada desenvainada, sin dar concesiones de ningún tipo con tal de hacer frente a la corrupción y malos manejos del dinero público.
Para apaciguar los ánimos y las inquietudes al interior del PRI, PRD, PAN, PAC y PS la ex candidata al gobierno del estado por la coalición “Unidos por Tlaxcala”, Anabel Aválos debería alistar un mensaje más que de agradecimiento por la participación y apoyo como ya lo hizo en su momento, de conciliación, ánimo, fortaleza, unidad y esperanza, aunque sus asesores le digan que no es conviene, más importa ser valiente que esconderse y callar. Como la ve.
BOMBAZOS…
Digan lo que digan pero el retorno a clases presenciales en Tlaxcala no resultó lo que se esperaba, la asistencia de alumnos fue mínima, en virtud de que la mayoría de padres familia no quisieron exponer la salud de sus hijos y la de los maestros, autoridades involucradas deben analizar y revalorar esta determinación, en virtud de que aún no hay condiciones sanitarias en las escuelas para un retorno seguro y más por la posibilidad de un rebrote del virus. Que tal.
ARTILLERÍA PESADA…
Lo escrito hace ochos días en esta columna de análisis y opinión se cumple, la gobernadora electa Lorena Cuéllar confirmó en una entrevista con la Jornada de Oriente –sin dar nombres- que ya tiene designados a las personas que se encargarán de la Secretaría de Gobierno, Oficialía Mayor y de la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), el resto de los servidores públicos de la nueva administración permanece en análisis, ojalá se trate de tlaxcaltecas y no de foráneos, porque así lo prometió en campaña la próxima gobernadora. Ya se verá, el tiempo acomoda a todos en su lugar.
Familias tlaxcaltecas a través de este medio envían un reconocimiento y felicitación a funcionarios y trabajadores de la Coordinación General de Ecología (CGE) por el buen trabajo de mantenimiento que realizaron para embellecer el jardín botánico de Tizatlán. En hora buena.
Hasta la próxima entrega de Frentes de Guerra.
