Peredo boys defienden su mina de oro

Brissa Montero

Arrecian las pugnas al interior del Partido Socialista (PS), por mantener la dirigencia estatal que hasta ahora está encabezada por la líder eterna Rosalía Peredo Aguilar, quien con el respaldo de sus incondicionales y fieles seguidores se aferra a perpetuarse en ese partido a cambio de no perder su mina de oro.

A través de un diario de carácter estatal, personajes como Roberto Núñez Baleón, Luis Salazar Corona, Jorge García Luna y Patricia Zenteno Hernández, entre otros, considerados afines a Peredo Aguilar, se resisten a perder las canonjías aplaudiendo la resolución de magistrados del Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET), quienes dejaron sin efectos el Tercer Congreso Estatal del PS.

“Derivado de las irregularidades de este Tercer Congreso Estatal Ordinario del Partido Socialista de Tlaxcala impugnamos dicho acto ante el Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET), manifestando que no se garantizó el procedimiento establecido en los estatutos del Partido, así como de la normatividad establecida por las instancias en la materia”, refieren.

Asimismo, sostienen que “de forma fraudulenta un grupo de personas ajenas al partido y algunos militantes, dejaron al descubierto sus intereses reales guiándose por la ambición personal”, en clara alusión a Jesús Pluma Ríos y al diputado local Agustín Nava Huerta, quienes resultaron electos como presidente y secretario general del PS el pasado 30 de julio.

En contra parte, quienes resultaron al frente en el Congreso Estatal, así como diversos militantes, anunciaron que defenderán su triunfo argumentando que los resultados fueron legales y que el los elementos de las cuales se valieron los magistrados electorales para dictar su sentencia son falsos, por lo que impugnarán en la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para buscar la imparcialidad de la autoridad.

Ante ello, el partido de Rosalía Peredo, podría perder los beneficios que ha recibido en ese instituto político, como anteriormente le sucedió cuando estuvo al frente del Partido del Trabajo (PT), en ese entonces ante el fallecido Juan José Piedras Romero.

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