Elementos de la Policía Estatal se sienten inmortales y hacen gala de su power

Amparados en sus armas y uniformes, elementos de la Policía Estatal dependientes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) intimidan a ciudadanos y además se sienten inmortales ya que no respetan las medidas preventivas ante la emergencia sanitaria por Covid-19 que se vive en el mundo y por ende en la entidad.

De acuerdo a la denuncia recibida por Luis Enrique “N”, fue la tarde del pasado viernes cuando elementos de la corporación policiaca intentaron intimidarlo en la plaza comercial Gran Patio ubicada en el municipio de Apetatitlan.

Resaltó el afectado que después de realizar algunas compras en las tiendas departamentales, los elementos liderados por el jefe regional de recuperación de vehículos de apellido Cervantes hicieron gala de su poderío, al realizar una revisión de rutina a un automóvil porque supuestamente tenía reporte de robo.

Solo que al no encontrar ninguna irregularidad en la unidad, enojó a los uniformados y uno de ellos buscó todo tipo de pretextos para infraccionarlo, sin embargo, no lograron su cometido ya que no hubo acción legal que justificara la misma.

En las imágenes arriba publicadas se observa como los funcionarios estatales son los primeros en no respetar las medidas sanitarias que implementó el Gobierno del Estado ya que no portan cubrebocas y tampoco respetan la sana distancia para evitar posibles contagios por Covid-19.

Aunado a lo anterior, tampoco portan gafete que los acredite como personal de la SSC, acción que además de que genera desconfianza violarian la Ley de responsabilidades de los servidores públicos que obliga a acreditarse con credenciales oficiales vigentes.

Lo que también causó preocupación a la población, es que los uniformados viajan en unidades oficiales y portan armas sin que ninguno de ellos porte una identificación oficial como se observa en las gráficas.

Por lo anterior, el afectado pidió a la SCC dotar de las acreditaciones necesarias a los servidores públicos y frenar los abusos luego de que la actividad ha disminuido derivado de la contingencia sanitaria por Coronavirus.

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