Roberto Nava Briones
Luego de los magros resultados electorales, las traiciones al interior de su Gobierno y la mala atención de funcionarios de diversas dependencias hacía la población, el gobernador Marco Mena adelantó que en los próximos días hará limpia en su gobierno y en una clara alusión a su antecesor Mariano González Zarur, sostuvo que ya es tiempo erradicar la dinastía de apellidos y linajes así como dejar atras actitudes patrimonialistas.
Fue en una reunión que tuvo verificativo este dia jueves, en donde convocó a todos los funcionarios que conforman la administración publica estatal, alcaldes, diputados locales, delegados federales titulares de organismos estatales entre otros, para leerles la cartilla y dejar en claro que a partir de este dia su gibierno dará un giro.
“No voy a tolerar la falta de compromiso en el desempeño de la función pública…tsmpoco desgano ni la falta de resultados…no voy a permitir ni la indiferencia, ni la apatia, ni la deslealtad”, sostuvo el mandatario el mandatario ante un centro de convenciones repleto de trabajadores del gobierno estatal.
En su mensaje al que asisitieron varios ex candidatos por su partido el PRI a diputaciones federales y locales perdedores, Marco Mena dejó entrever, que su administración dejará de depender de aparentes acuerdos políticos con grupos y actores que no han co tribuido al desarrollo del Estado.
“Vamos a dejar atras en definitiva actitudes patrimonialistas, aspiraciones dinásticas o de apellidos o linajes como criterio…vamos a aprovechar este momento histórico para México para hacer de Tlaxcala un lugar de reconocimiento al mérito, a la capacidad personal y familiar de luchar por la vida con dignidad y respeto a uno mismo y a todos”, enfatizó.
El mensaje rudo y poco usual en Marco Mena, provocó nerviosismo en decenas de asistentes quienes al término del mismo salieron literalmente huyendo, otros más, como viles judas se despidieron hasta de abrazo de su aún jefe.
Aqui el mensaje completo:
Muchas gracias por su presencia aquí esta tarde. Los he invitado a que nos reuniéramos hoy para comentar con ustedes, en mi carácter de Gobernador, la forma en que observo la nueva condición política de México, a raíz de la elección del pasado domingo, y la manera en que voy a actuar en consecuencia desde el Gobierno de Tlaxcala.
Hay un nuevo mapa político en el país. Es un mapa que refleja cambios profundos. La elección del 1º de julio reveló el agotamiento de muchas estructuras, muchas actitudes, muchas formas de la política. Es un momento de reflexión, evidentemente, y, sobre todo, de decisiones.
Muchos factores históricos de la política mexicana mostraron estar exhaustos o fuera de uso. Por ejemplo, el sistema de partidos. No es el único factor; hay muchos otros. La elección del 1º de julio es punto de partida de un camino diferente para México; un camino que no habíamos conocido antes. La mayoría decidió, aunque votó todo México. Y, ahora, ¿qué?
Quedó claro que hay muchas cosas a las que la gente dijo que ya no. Dijo enfáticamente que ya no. Y eso incluye a quienes votaron por una opción u otras. Incluyo a todos.
Reconocer las transformaciones de la realidad es función primordial de buen gobierno. Las entiendo y actúo en consecuencia.
No voy a eludir ni ignorar las nuevas condiciones. Al contrario. Nos vamos a adaptar con éxito. No tengan duda.
Les voy a plantear el principio del cómo.
Vamos a dejar atrás, en definitiva, actitudes patrimonialistas, aspiraciones dinásticas o de apellidos o linajes como criterio. Vamos a aprovechar este momento histórico para México para hacer de Tlaxcala un lugar de reconocimiento al mérito. Reconocimiento a la capacidad personal y familiar de luchar por la vida. Con dignidad y respeto a uno mismo y a todos.
No voy a tolerar la falta de compromiso en el desempeño de la función pública. Tampoco, desgano ni falta de resultados. No voy a permitir ni la indiferencia, ni la apatía, ni la deslealtad.
Hay que llamarle a las cosas por su nombre, algo que parece que le cuesta mucho trabajo a muchos. Vamos a dejar atrás ambigüedades. Vamos a dar el peso y significado correcto a las palabras. Un sí o un no significarán, efectivamente, un sí o un no.
Hay muchos negativos que dejar atrás, pero también hay que pensar el futuro de Tlaxcala en positivo. Esa es mi actitud. Pensar a Tlaxcala en positivo es mi decisión y exijo que sea la actitud de gobierno. Pensar a Tlaxcala en positivo.
Por eso, es mi diagnóstico que se necesita ajustar la forma de organización, el modo de trabajo y la ejecución del acto de gobierno. Debemos entender que esto es producto de las nuevas circunstancias del país, que exigen actuar con mayor rapidez y más apremio.
Vamos a modificar de tajo el modo de trabajo. Reorganizaremos el gobierno en forma práctica, para facilitar las tareas entre las dependencias y ser más eficaces. El gobierno funcionará a base de proyectos y tareas muy concretas, de modo que no haya dispersión de responsabilidades ni tardanzas.
Estoy estableciendo, formalmente, a partir del día de hoy, Grupos Ejecutivos de Trabajo, con misiones claras y específicas, con plazos de cumplimiento definidos.
Estos Grupos Ejecutivos de Trabajo están integrados por titulares de dependencias y funcionarios de diverso orden jerárquico. Los cuales presidiré yo, personalmente.
Destaco algunos de los Grupos Ejecutivos de Trabajo más importantes:
• Proyectos especiales de obra pública
• Mejora de la economía de las familias
• Atracción y conservación de inversiones
• Desarrollo policial y equipamiento de seguridad
• Mantenimiento y mejora de escuelas
• Mantenimiento y mejora del funcionamiento de los Centros de Salud
• Medidas concretas para la igualdad entre mujeres y hombres
• Atención a productores del campo
• Gasto – Financiamiento
• Fiscalización y vigilancia del gasto
• Mejora de atención al público
• Gobierno abierto
Déjenme darles un ejemplo. El nuevo Hospital General de Tlaxcala está asignado como responsabilidad efectiva al Grupo Ejecutivo de Proyectos Especiales de Obra Pública. En este se encuentran las dependencias responsables de los procesos administrativos, permisos y requisitos legales, exigencias médicas, así como financiamiento y construcción. En este caso, la licitación del proyecto se publicará en los próximos días.
Otro ejemplo. Se comprarán 200 patrullas para fortalecer la estrategia de seguridad pública. Esta tarea está asignada al Grupo Ejecutivo de Trabajo de Desarrollo Policial y Equipamiento de Seguridad. La licitación estará lista este mes y las patrullas estarán en servicio en septiembre. Un proceso con transparencia y prontitud.
Ha transcurrido un año y medio de gestión de este gobierno. Aceleramos el paso, la adaptamos a las nuevas circunstancias, mejoramos sus mecanismos de actuación de la administración y, por eso, refrescaremos también en los próximos días los cuadros responsables en función de su eficacia y compromiso con el desempeño del cargo.
Hay dos razones para refrescar los cuadros de funcionarios. La primera, ya la mencioné, es revitalizar el funcionamiento de las oficinas. La segunda es por falta de compromiso con el gobierno y deslealtad con el ciudadano, que es a quien nos debemos y nuestro único foco de atención. No es válido, no es correcto, no es aceptable ni admisible que un funcionario sin dar resultados obre y se exprese mal del propio gobierno. No se dan cuenta que se denigran a sí mismos. Hay quienes no quieren estar en el gobierno ni con el gobierno, no los vamos a tener a fuerza.
Ya se los dijes y lo reitero, vamos a ver a Tlaxcala en positivo. Hay que hacerlo así. Esta no es una opción. Es una decisión. Hay elementos fundados para ver a Tlaxcala en positivo.
La economía local sigue creciendo. El empleo formal, también. Tenemos el número de empleos formales más alto en nuestra historia. Más de 99 mil. ¿Qué ha ocurrido al respecto en este año y medio? Ha ocurrido que uno de cada diez empleos formales se han creado en este periodo. Queremos y necesitamos más, pero tomemos conciencia de los logros de todos.
También, tenemos el Sistema Estatal de Becas más grande de nuestra historia y apunta a convertirse en el mejor de México.
Señoras y Señores:
Tengan muy claro –sería absurdo negar que en algunos causa incertidumbre, quizá hasta ansiedad—, que habrá un genuino encadenamiento de nuestro trabajo con el nuevo Gobierno Federal que asumirá el próximo primero de diciembre.
Se los digo claramente, no tengan ninguna duda respecto a que el Gobierno del Estado de Tlaxcala se insertará con éxito, con eficacia y respeto mutuo al trabajo de la administración del próximo Gobierno Federal. Eso es lo que va a suceder. Tenemos que construirlo desde ahora. Lo estamos ya haciendo. Vamos a facilitar la relación entidad federativa – Gobierno Federal.
Por delante, sólo resta trabajar bien. Importa el interés de todos, no el de unos cuantos. Al Gobierno Estatal le queda claro. Fijar la vista en un futuro de estabilidad. Para eso nos necesitamos todos. Nadie debe ni sentirse ni estar excluido. Prosperidad y dignidad. Los tlaxcaltecas y su modo de vida para contribuir a la grandeza de México.
No es tiempo de ánimos facciosos, mucho menos de ambiciones coyunturales. Precisamente, reconocer el presente, reconocer la nueva condición política de México, exige poner al ciudadano en el centro y como referente único, indispensable, de toda decisión política. Ha concluido el tiempo de las continuidades.
Tlaxcala tiene que estar y estará en la nueva geografía política de México, en la nueva geografía mexicana de lo que se hace bien, de lo que es justo, de lo que corresponde a los tlaxcaltecas y a los mexicanos como deseo y como merecimiento. Lo estamos haciendo.
Muchas gracias.