Refuerza LXV Legislatura protección a niñas, niños y adolescentes con reformas al Código Penal

La LXV Legislatura del Congreso del Estado de Tlaxcala aprobó  reformas al Código Penal del Estado de Tlaxcala para fortalecer la protección contra la violencia sexual. El Dictamen con Proyecto de Decreto, presentado por la Comisión de Puntos Constitucionales, Gobernación y Justicia y Asuntos Políticos, armoniza la legislación estatal con la federal, elevando la edad de protección a menores hasta los 18 años.

La iniciativa, impulsada por la diputada Lorena Ruiz García, responde a datos alarmantes sobre violencia sexual infantil y a los estándares establecidos por tratados internacionales como la Convención sobre los Derechos del Niño. Hasta ahora, el Código Penal de Tlaxcala solo brindaba protección automática a menores de 14 años, lo que generaba una brecha jurídica en perjuicio de adolescentes entre los 14 y 17 años.

Entre las modificaciones aprobadas destaca la reforma a la fracción I del artículo 289, que establece que comete delito quien realice cópula con una persona menor de 18 años, aun sin violencia. Asimismo, el artículo 293 fue reformulado para definir con mayor claridad el delito de estupro, sancionando con prisión y multa a quien obtenga el consentimiento de adolescentes mediante seducción, engaño o abuso de poder.

Estas reformas reconocen que las y los adolescentes, por su etapa de desarrollo, enfrentan mayores riesgos ante situaciones de violencia sexual y que el Estado tiene la obligación de brindarles una protección reforzada. Se trata de una medida que promueve el interés superior de la niñez y evita retrocesos en sus derechos, como lo establece el principio de progresividad en materia de derechos humanos.

El Dictamen fue aprobado por unanimidad de las y los diputados, durante la vigésima novena sesión ordinaria del Congreso del Estado. Entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Periódico Oficial del Gobierno de Tlaxcala, y con ello, la LXV Legislatura reafirma su compromiso con la protección de la niñez y adolescencia, y con un marco legal que ponga al centro la dignidad humana y la prevención de la violencia.