Alejandro Netzahualcóyotl no aprendió de la derrota, sigue de mamón y grosero

Brissa Montero

El pre candidato por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) a la presidencia municipal de Chiautempan y perdedor Alejandro Netzahualcóyotl Sandoval, se siente ganador de la contienda con un puñado de acarreados que en días pasados fueron llevados a un evento para aplaudir su inminente nueva derrota.

Y es que la actitud sobrada con que se conduce el perredista, ha contribuido en generar la animadversión hacía su persona, ya que sus orígenes en la política se dieron con el ex alcalde Antonio Mendoza Romero y al emular al corrupto ex alcalde -su maestro-, desdeña la cercanía y la interacción con la población.

“Alejandro Nezahualcóyotl es un tipo mamón, payaso y grosero…es un oportunista no aprendió la lección que le dio la gente…no lo queremos por creído…siente que vuela y esos que no tiene alas…es esbirro de Toño Mendoza…trae buena escuela…aguas con las alimañas”, entre algunos comentarios que no ven con buenos ojos la participación de nueva cuenta de un perdedor.

Según personeros del aspirante que ha saturado el municipio con una campaña de posicionamiento denominada ponte el bigote, se siente seguro de ganar la siguiente elección, gracias a las torpezas y abusos del actual alcalde morenista que ha dejado la gobernabilidad en manos de sus hijos.

De no haber sido por el cobijo que Nezahualcóyotl Sandoval tiene del Diputado local Juan Manuel Cambrón Soria, no hubiera logrado posicionarse en el argot político, ya que en los hechos no cuenta con la fuerza, ni mucho menos con la experiencia para salir triunfador en las elecciones del mes de junio de este año.

Hasta el momento, es aspirante a candidato único por el sol azteca solo que no ha sido oficializado por la dirigencia estatal en manos de Patricia Zenteno Hernández, una delincuente que ha aprovechado el cargo político para librar la acción de la justicia, luego de la denuncia que enfrenta en la PGJE por el delito de fraude al contratar servicios publicitarios y no pagar cerca de un millón de pesos desde hace varios años.