La periodista Ana Laura Vázquez quien fuera corresponsal del periódico Reforma en Tlaxcala, denunció ser presa de discriminación institucional y de sufrir violencia por el Gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros, al grado que fue fichada y echada de un evento público que organizó la Secretaría de Seguridad Ciudadana y daba cobertura periodística.
Fue en la red social Facebook, donde la comunicadora lamentó que, en el ejercicio de su profesión durante varios sexenios, hoy fueron vulnerados sus derechos por el Gobierno en manos de una mujer.
“Nunca en todas las administraciones públicas del Gobierno de Tlaxcala, yo, como periodista, había vivido tanta violencia y discriminación institucional como en la actual administración, por cierto, encabezada por una mujer”.
Recordó que, si bien en otras administraciones hubo diferencias, el actual gobierno morenista rebasó los limites; “Tal vez en las anteriores administraciones fueron más discretos, pero en la actual, ayer llegaron al grado de ordenar que me sacaran de un evento público”.
“Hicieron todo lo posible para que durante un evento en la Secretaría de Seguridad no se armara un escándalo por sacarme, me tomaron fotografías y video (violaron mi derecho a la privacidad dentro de una institución pública), y yo solo estaba haciendo mi trabajo, cubriendo un evento público para hacer mi nota”, resaltó en su denuncia pública.
Ana Laura lamentó que Lorena Cuellar quien fuera defensora de la violencia hacia las mujeres hoy sea la promotora de ello; “y mientras intentaban sacarme, yo recordaba que alguna vez fui a hacer una entrevista con la mujer que hoy gobierna para hablar sobre la violencia política que ella enfrentó cuando era candidata. Qué vueltas da la vida, esa mujer hoy gobernante, de víctima de violencia pasó a ser la violentadora de las mujeres periodistas que, en su momento, visiblizamos la violencia en su contra”.
La comunicadora reiteró su molestia por las vejaciones que fue objeto; “Ayer viví una experiencia entre miedo, coraje, impotencia; la práctica del abuso del poder público descaradamente ejercida en mi agravio por parte del Gobierno de Tlaxcala”.
Soy una periodista que ejerce el periodismo en Tlaxcala, el que dicen que es el estado más seguro del país, de manera independiente, muy independiente. Ahora me pregunto, luego de esa violencia y discriminación institucional ¿a quien me acerco, a la gobernadora, a la Comisión Estatal de DerechosHumanos, a la oficina para la protección de periodistas creada por el mismo gobierno local, al gremio de periodistas?, ¿a quién?
Después de la agresión sufrida por el Gobierno del Estado de Tlaxcala, la periodista exigió a las autoridades correspondientes a que sean respetados sus derechos como mujer y trabajadora para que frenen los actos violentos en su contra.
“He aguantado tanta discriminación y violencia institucional, pero siempre llega el momento de decir BASTA, NO MÁS, porque como mujer periodista ya no defiendo mi derecho a la libertad de expresión, ni mi derecho a la libertad de prensa, defiendo mi derecho al trabajo, mi derecho al trabajo libre de violencia y de todo acoso, porque del derecho al trabajo dependen como cascada muchos otros derechos que garantizan a todas las mujeres, periodistas o no, nuestra estabilidad física, emocional y económica. #Basta #NoMasViolencia contra las mujeres periodistas en Tlaxcala”.
