Semana caótica: sismos, manifestaciones , la no aprobación de la Guardia Nacional, y el alarmante aumento de la inseguridad en el estado, sólo son algunas noticias que llenaron los espacios de medios de comunicación escritos, televisivos, radiofónicos y de cientos de medios digitales, si bien, nuestro estado presume ser uno de los estados más seguros y pacíficos del país, la realidad es otra, Tlaxcala, es un estado muy politizado, su gente no se deja engañar fácilmente y así como la ciudadanía da apoyo también sabe cuándo retirarlo, esto en relación a los dos conflictos gremiales que viven actualmente dos organizaciones sindicales, el sindicato 7 de mayo y el sindicato de SESA, dos gremios que luchan, no por sus derechos laborales y de prestaciones, sino porque se respete la hegemonía de grupos que por años han hecho de estas dos organizaciones su coto de poder económico y político.
Si bien es complejo analizar las estructuras de los dos sindicatos, trataré de analizar primero al Sindicato 7 de Mayo, que aglutina a miles de trabajadores de base, una organización que por décadas ha estado controlada por el Estado, ya que la mayoría de dirigentes, eran palomeados desde los pasillos de palacio de gobierno, de ahí que las negociaciones rara vez se tornaban ríspidas, la mayoría de ocasiones salían con buenas negociaciones y muy buenas transacciones para la cúpula sindicalista, sólo que las transiciones gubernamentales vinieron a cambiar ese rol, la caída del PRI, la llegada del PRD, del PAN, el regreso del PRI y la llegada de MORENA, vinieron a desestabilizar cacicazgos y dieron origen a nuevos grupos que vieron la oportunidad de tratar de eternizarse en el poder, de ahí surge el grupo de Pedro Erazo y Guadalupe Rodríguez, que por más de dos décadas ostentaron el poder, controlando y negociando muy buenas prestaciones con los gobiernos en turno principalmente con el PRD y el PAN, prestaciones como canastas básicas, viajes, becas para los hijos de los trabajadores, bonos, la construcción de su edificio, el obtener dos niveles más cuando se jubila un trabajador y una serie de apoyos y de canonjías, que también llevaron a la quiebra a Pensiones Civiles del Estado, pero siguiendo con el poder en el sindicato, una vez que la familia Erazo – Rodríguez, empieza a perder el control total del sindicato ya que surgen grupos contrarios, optan por imponer a su vasallo, Edgar Tlapale, pero la suerte les cambia totalmente al regresar el PRI, al poder, ya que el gobierno inteligentemente absorbe al nuevo líder con poder político y económico, y desconoce a sus antiguos jefes, amén de que la líder cayo en el error de crear una secretaria adjunta donde trataba de seguir decidiendo todo, lo que creó el divisionismo y la ruptura de un grupo que trataba de crear una monarquía.
Sólo que la política le jugó otro cambio y el PRI, vuelve a caer pero ahora con MORENA y Lorena Cuellar, una ex priista y ex perredista, que conoce bien la historia del Sindicato 7 de Mayo, revive al clan, pero en el intento de recuperar el poder del sindicato falla y en venganza por no apoyarla en su campaña decide dar la orden para que desconozcan a toda la estructura del sindicato que encabezaba Edgar Tlapale, sólo que se le olvidó a la titular del poder ejecutivo, dos cosas importantes, muchos trabajadores por debajo de la mesa la apoyaron con su voto para que llegara a la gubernatura, y dos que los ex líderes, aunque quizás sean sus amigos y compadres, ya no cuentan con el apoyo mayoritario y menos imponiendo a su hija, lo que ha generado un conflicto entre burócratas, que han caído en un juego que nada les beneficia ni a una, ni a otra parte, ya que si no buscan la unidad estarán sometidos al poder del estado y sus prestaciones económicas, de salud y de derechos laborales estarán en peligro, de ahí la importancia de que surja la unidad y los personajes que sobre intereses personales y de grupo primero vean por los intereses de miles de burócratas y de sus familias, el gran reto para Sergio González, no será convencer a los dos grupos, sino convencer a Lorena Cuellar, que deje que los trabajadores libremente decidan quienes serán sus dirigentes, en la Sección 31 del SNTE paso casi lo mismo, el gobierno apoyo a Arturo Morales, le ganó la base y gano Cutberto Chávez, y con sutileza y un poco de poder y canonjías lo tienen comiendo de su mano y nadie dice nada.
En lo que corresponde a la líder de la Sección 27 del Sindicato de SESA, primero hay que reconocerle que ha sabido mantenerse en la dirigencia por más de una década, pero ser siempre el mismo personaje y practicar los mismos viejos vicios, han ido cansando a la clase trabajadora, quizás se puedan enumerar una serie de malas prácticas sindicales como son la corrupción, nepotismo, enriquecimiento ilícito, el utilizar el poder para ganar posiciones políticas y muchas cosas más, pero lo importante será ver la capacidad de Blanca Águila, para que sobre intereses personales y de grupo, primero defienda los intereses de sus trabajadores, ya que, sí por decreto cambio SESA, por IMSS- BIENESTAR, lo más lógico es que la líder se siente a las mesas de negociación y luche por que todos los derechos laborales y de prestaciones les sean respetados a sus trabajadores y que si SESA, sigue funcionando que siga lidereando al pequeño grupo que le quede, y si desaparece SESA, que negocie una posición, una vez que termine su diputación ella sabe hacerlo, su líder nacional seguramente ya le está midiendo el agua a los camotes, y sabe que el poder se ejerce cuando se tiene y que muchos líderes que se han pasado chipotles, se van a la cárcel, ahí está Elba Esther Gordillo, la Quina y muchos más que son los mártires de los sexenios.
En cuanto a los sismos, son fenómenos naturales que no tienen una explicación lógica, de que en México, ya sean tres terremotos el mismo día, aunque con horas o minutos de diferencia, aquí lo importante será el seguir creando una conciencia de prevención y que si hay un ser divino seguir creyendo que nos protege, ya que este último sismo por su intensidad pudo haber causado una gran tragedia, a seguirnos cuidando y suerte para todos, ni el poder, ni el dinero, pueden sobre un fenómeno natural.