Los problemas en la Secretaria de Salud, cada día son más constantes, principalmente desde el momento que el gobierno federal anuncio que SESA, se transformará en poco tiempo en IMSS – BIENESTAR, ahí surgieron una serie de inconformidades de la dirigente sindical: Blanca Águila, quien vio amenazados sus intereses personales y de un pequeño grupo que por más de una década han hecho del sector salud un negocio, ante la complacencia de los gobiernos en turno, lo más delicado de las manifestaciones, y ahora la toma de algunas oficinas es que la líder veladamente está enfrentando y dividiendo a los trabajadores, lo que puede propiciar enfrentamientos entre la clase trabajadora.
Si la Bandera de la dirigencia de SESA es el aspecto laboral, las prestaciones y el respeto de la antigüedad, seguramente ya existe un estudio sobre estos aspectos y sería bueno que existiera la capacidad para que por medio de mesas de negociación puedan llegar acuerdos que beneficien a los trabajadores, pero si la idea es estar en contra de todo y en favor de nada, solo habrá una mayor confusión y el dicho popular reza “que a rio revuelto, ganancia de pescadores” y la dirigente sindical sabe que mientras pueda manejar la buena fe de los trabajadores, su monarquía, las cuotas sindicales, las plazas y ascensos y toda una serie de canonjías, seguirán dándole un poder, que le permita negociar puestos de elección popular y continuar eternizándose en la dirigencia de un sindicato que le ha dado poder y dinero.
Por cierto, sería bueno que los trabajadores le exigieran cuentas a Blanca Águila, ya que el manejo de cuotas sindicales por más de una década seguramente asciende a millones de pesos, que no se conoce en qué se han utilizado, también deben hacer un estudio laboral de quienes han sido beneficiados con plazas y ascensos, ya que muchos trabajadores por años han sido ignorados o simplemente utilizados para que un reducido grupo de incondicionales y familiares se hayan beneficiado, por cierto, me dio risa los argumentos que utilizan los incondicionales de Blanca Águila, para tomar oficinas y hasta pedir la salida de algunos funcionarios, ya que ponen como bandera que la infraestructura de varios centros de salud está en pésimas condiciones, y hasta obsoletas, situación que no es nueva y que tuvo que haber sido exigida por la dirigente Blanca Águila, con los Secretarios de Salud en turno y con los gobernadores Mariano González Zarur y Marco Mena, pero como era incondicional de los gobernantes no veía nada, todo eran acuerdos políticos y prebendas, hoy las cosas han cambiado y quienes no están de acuerdo con los caprichos de la líder son sus enemigos, y trata de quitarlos utilizando a grupos porriles que amenazan y toman oficinas, de ahí, que se hace necesario que las autoridades realicen auditorías a la gestión de la aún líder, ya que con la transformación de SESA a IMSS BIENESTAR , pronto se terminara el cacicazgo de Blanca Águila.
Por cierto, eso de generar conflictos para querer mostrar musculo, sólo muestra a una Secretaria General como una líder vividora del poder, que en cuanto ve en peligro de perder su mina de poder y dinero, trata de crear problemas y enfrentamientos, en relación a que hay escases de medicamentos, también ese problema no es nuevo y la pregunta es ¿Por qué hasta ahora le sale lo humano a la líder? Cuándo lleva más de una década como líder sindical y no había tomado oficinas para exigir abasto de medicamentos, ante este panorama nada halagador para el sector de salud, solo queda saber hasta cuando los trabajadores del sector salud seguirán siendo súbditos, una líder que sólo vela por sus intereses personales y de un reducido grupo de familiares e incondicionales.