Candidato a la diputación local de Morena por el distrito 13, Jovany Ixtlapale busca argumentos ridículos para justificar rechazo de la gente a sus aspiraciones.
Pese al marcado rechazo a su proyecto de trabajo por parte de la ciudadanía, el candidato a la diputación local por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para el distrito 13, Jovany Ixtlapale Anselmo, busca justificar con argumentos ridículos su falta de simpatía entre la gente, pues dice se trata de campañas negras en contra por ser el puntero en las encuestas.
Sin embargo, la realidad es que a seis días de que venza el tiempo legal para hacer campaña, no logra levantar, debido a sus constantes tropiezos como acudir borracho a pedir el voto y ser déspota e insensible con los votantes.
Aunque a toda costa busca aprovechar los últimos días de campaña, la población le manifiesta su descontento por el mal manejo que tuvo como alcalde de Tepeyanco, lo que le valió que varias ocasiones se manifestarán a las afueras de la presidencia e incluso fue tomada.
“Como vamos a confiar en quien como alcalde no dio el ancho, siempre prepotente, alcoholizado y burlándose de sus gobernados que le realizaban peticiones básicas para mejorar servicios como el de agua, recolección de basura y alumbrado público, que jamás logró solucionar”, puntualizó.
Mañosamente Ixtlapale Anselmo pensó que colgándose de Morena y de su comadre Lorena Cuellar lograría candidata al gobierno del estado por la coalición “Juntos Haremos Historia en Tlaxcala” lograría la simpatía de los ciudadanos, sin embargo, pese a que se le ha pegado como sanguijuela en los eventos realizados en el distrito el rechazo es evidente.
En su última carta que le queda por jugarse, trascendido que repartirá dádivas a cambio del voto como despensas, no obstante, la población del distrito 13 está convencida que ni con regalos los harán de cambiar de opinión para votar por la “rata borracha” como lo apodan sus paisanos.