*No existe registro del financiamiento ni del padrón de beneficiados*
Creada hace 26 años, la Fundación de Desarrollo Social Tlaxcala A.C. (Fudestac), la cual preside la actual candidata a gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, opera con discrecionalidad, opacidad y por lo tanto sin transparentar ningún aspecto de sus finanzas.
En el 2020 los investigadores Ana Díaz Aldret, David Arellano Gault y Elena Tivota, del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), analizaron la legitimidad y transparencia de ellas a través del estudio Legitimidad y transparencia de las organizaciones de la sociedad civil en México.
El resultado, 57 de 100 no mencionan el origen de su financiamiento y 43 de ellas dan datos pocos específicos al respecto.
Para dicho análisis se tomó una muestra aleatoria de 200 organizaciones mexicanas a partir de dos bases de datos: el Directorio de Inscripción al Registro Federal de Organizaciones de la Sociedad Civil a cargo del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) y del Directorio Nacional de Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) a cargo de la Secretaría de Gobernación.
Y pese a que la Fudestac se encuentra en el Registro Federal de Organizaciones de la Sociedad Civil, representada por Gabriela Araceli Díaz Cruz, desde el 20 de junio del 2005, en el directorio Nacional de Organizaciones de la Sociedad Civil de la Secretaría de Gobernación no se encuentra registro de dicha fundación.
Extrañamente, es en el Directorio Nacional de Organizaciones de la Sociedad Civil, el cual da a conocer los informes anuales, el número de personas beneficiadas, y el tipo de actividad, pero de estos datos no hay ningún registro reciente sobre la Fudestac.
Cuéllar Cisneros ha señalado que esta asociación civil, la ha sostenido con recursos propios y durante más de 25 años ha logrado la entrega de ayudas funcionales, además asegura ofrece servicios médicos, terapias de rehabilitación, medicamentos y hasta operaciones a personas quienes tienen problemas de cataratas, miopía y astigmatismo.
Sin embargo, de esto, no hay un padrón que lo compruebe…
El pasado 23 de noviembre del 2020 en entrevista a un diario de circulación local Cuéllar Cisneros afirmó que no lleva un padrón sobre el número de personas a las que durante estos 25 años ha apoyado de forma desinteresada porque a la fecha dijo, “a cada individuo o familia no se le preguntan datos personales”.
Al no haber registro de sus fuentes de financiamiento, sus dinámicas de operación e intereses; además de la relación que mantienen con el gobierno y sus miembros, la Fudestac opera de forma irregular, ocultando información de sus recursos y actividades prácticamente desde su creación.
