Arturo Tecuatl
¿Quiénes son los estrategas de los proyectos políticos más visibles: Morena y la Coalición Todos Unidos por Tlaxcala?
Es muy interesante por ejemplo: otrora aliados, el seis de junio se verán las caras, es decir, se están desafiando el ex gobernador Hector Ortiz-dueño del PAC y uno de los pilares de la Alianza, y los dos puntales de Lorena Cuéllar: Víctor Cánovas y Daniel Herrera Murga.
¿A ver, quién, Héctor Ortiz o sus dos ex colaboradores, Cánovas y Herrera Murga, tienen más dinero para operar?
El primero fue mandatario estatal, y ustedes saben que a gobernadores como él ni les preocupa el asunto monetario, sino consolidar sus planes.
¿Cuál es su plan? Pues el municipio de Tlaxcala a través de su brody, el doctor Serafin Ortiz. De ahí otra vez a la gubernatura. En su valija hemos de ver, ¿la Procuraduría General de Justicia (PGJET)?, ¿la Coordinación de Prensa?
¿Ya ven, se estaría equipando con lo necesario para 2027?
En la otra esquina, ¿Cuánto trae Cánovas? Dicen que es heredero de la centaviza del extinto Rafael Moreno Valle.
Dicen que, vetado en Puebla por Luis Miguel Barbosa, construye acá un proyecto con Lorena, un proyecto para detonar obras, todas las que pueda, grandes, costosas, que resulten un buen negocio para seguir creciendo esa tremenda fortuna, puesta en sus manos por alguien para, trabajarla y claro, incrementarla.
Es decir, las inminentes Candidatas, Anabell y Lorena, no son simples personajes con sus respectivos discursos. Serán los rostros visibles en una serie de grandes negocios. De ahí la pasión por obtener el triunfo.
La doña, juega a no perder
Hay una operadora común, ¿quién?, ¿Beatriz Paredes?, yo creo que sí, y hay evidencia que está presente en las dos casas de campaña porque, no me digan que remover, ocultar o camuflar a Elia Sánchez González como vocera de Lorena, signifique que habrá sacado las manos del proyecto morenista, o sea, gane una u otra, ¡igual gana Beatriz!
¿Eso, se vale?, éticamente no, pero este es un negocio, este tipo de apuesta doble así lo confirma, y van implícitos perversidad, seguidores, nóminas, en pocas palabras gritar a los cuatro vientos: ¡Tlaxcala es mi plaza, y aquí me permito jugar como quiero, ¿alguien se opone?
Una pareja de cuidado
Me llaman la atención dos personajes a quienes Lorena ha preferido sentar en su casa de campaña, para tenerlos cerca, observarlos, no dejarlos sueltos: Antonio Velázquez Nava y Adolfo Escobar Jardínes.
Uno, con el tatuaje indeleble de “cachorro del orticisismo”, luego pródigo constructor con Anabell Ávalos pero hoy, lorenista de hueso colorado. El otro, Adolfo Escobar, panista, ex alcalde de la Capital y hasta protegido de Anabell en el espinoso “Polideportivo”, una obra edificada en terrenos irregulares y en tremenda pugna judicial.
Hoy, Adolfo Escobar es otro lorenista, seguramente inclujido por Sergio González, el incansable organizador del lorenismo, digamos la parte que trabaja, no solo uno más de lo que ya se frota las manos partiendo de los elevados indicativos de Morena.
La voracidad azul
Veía ayer al empresario lanero Gilberto Temoltzin, el más convencido de impulsar a Anabell, aunque esto haya significado borrar a Minerva Hernández Ramos.
¿Qué quiere el PAN?
Me dicen que las secretarías de Finanzas (Sefin), la de Desarrollo Económico (Sedeco). Además de los municipios de Apizaco, Huamantla, San Pablo del Monte. Insisto, esto es un negocio.
PRD, su elevada autoestima
El PRD nada más quiere la Secretaría de Gobierno. ¿Nada más?
Rosalía y su PS, salen muy caros
Cómo pensar que el Partido Socialista deje ir la Secretaría de Turismo (Sectur), la Coordinación Estatal de Protección Civil (Cepcet), y Fomtlax, la caja chica.
Rosalía Peredo vio la oportunidad de revivir aunque, francamente considero muy caro el precio de sumar su PS a la coalición Todos Unidos por Tlaxcala.
Transición de terciopelo
Esta, amigas, amigos, es una probada del reacomodo de fuerzas, de las definiciones y nombres y apellidos, intereses, apuestas dobles y todo lo que la gobernanza de Marco Mena Rodríguez, construyó como el terso proceso sucesorio, siempre bajo su control.