La iglesia católica se pasó por alto no realizar actos multitudinarios que pudieran ser condicionantes de un contagio masivo por la pandemia que se vive de Covid-19, y en el municipio de Chiautempan celebran la bendición de palmas con motivo del Domingo de ramos sin tomar las medidas que implementó la Secretaría de Salud (SESA) a nivel federal y estatal.
Fue en el templo de nuestra señora del Carmen ubicada en la calle Ignacio Picazo del municipio de Chiautempan, en la que se llevó a cabo este Domingo de Ramos la tradicional bendición de palmas por el sacerdote de ese centro religioso.
En el lugar, ninguno de los asistentes tomó en consideración las medidas que sugirió la SESA para evitar algún contagio como aplicar la sana distancia, el uso de cubre bocas, así como el uso de gel antibacterial.
También se observó en el lugar, a decenas de personas de la tercera edad que se dieron cita al acto religioso.
Según vendedores informales que se instalaron en el atrio del templo para la venta de palmas, aseguraron que la bendición de las mismas se realizó durante todo el día y en ninguna de ellas se tomaron las medidas preventivas.
Pese a que el obispo de Tlaxcala Julio César Salcido Aquino en el comunicado que envió el pasado viernes donde manifestó su preocupación de que los contagios puedan ir en aumento, la acción arriba referida contradijo su postura.
“…la iglesia preocupada por igualmente por sus fieles ha tomado varias medidas para evitar la concentración de personas. En nuestra diócesis desde el 17 de marzo se decretó la supresión de las misas dominicales y de las celebraciones de semana santa en todas las parroquias y capillas filiales”.
Agregó el comunicado que envió la diócesis tlaxcalteca, en el que resaltó; “…la salud y la vida de nuestro pueblo es una prioridad; la vida es un don que debemos proteger”, sin embargo, no fue acatada por todos los sacerdotes.