Esta semana que terminó, sin duda que fue muy agitada, tanto a nivel internacional, como nacional y estatal, las noticias de la expansión del coronavirus, sin duda que prendió los focos rojos en gran parte del mundo, ya que lo que inicio como un simple resfriado al paso de los meses se ha ido transformando en una epidemia que ha ido cobrando la vida de miles de personas en varios países del mundo, tan fuerte es la situación, que la Organización Mundial de la Salud, ya la declaró como una Pandemia, lo que debe hacer que los diferentes niveles gobierno tomen muy en serio la enfermedad, implementando protocolos y políticas públicas, que permitan que el sector salud, este preparado para hacerle frente a este problema que no solo ha generado incertidumbre en una sociedad que hablando con la realidad no ha tomado muy en serio lo que puede generar este virus, tan es así que las repercusiones del COVID-19, se han extendido al plano financiero donde la caída de las bolsas de valores, ha propiciado que nuestro peso pierda su valor ante el dólar, y otras monedas en el mundo, el martes y el jueves negro, no es nada halagador para las finanzas de nuestro país, si bien el Presidente López Obrador, ha utilizado un discurso un tanto superficial de que las finanzas de nuestro país están sanas, la realidad es otra, ya que los mercados financieros han sufrido su peor caída en tres décadas, y México no puede estar exento de las repercusiones futuras, tan es así que el titular de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, reconoció que el coronavirus, tendrá un impacto en la economía mexicana aún en el escenario más favorable.
Sin duda que el coronavirus, será un gran reto para el gobierno mexicano que encabeza Andrés Manuel López Obrador, ya que en un país de casi 130 millones de personas, sino se toman las medidas necesarias, las causas pueden ser muy significativas, y quizás hasta fatales, como está sucediendo en algunos países Europeos, donde desestimaron al Coronavirus, y hoy están en estado de emergencia, como le sucede a Italia, un país que según los medios de comunicación nacionales e internacionales, ya van más de mil muertes, lo que ha propiciado una parálisis, porque las ciudades están desiertas, hoy el gran reto del gobierno mexicano, es dejar a un lado los discursos y prepararse para enfrentar con una gran infraestructura médica-hospitalaria, personal de salud suficiente y capacitado, que permita hacerle frente a este mal mundial, aunque lo más importante será tener el poder económico, que permita que los 130 millones de mexicanos, sientan confianza en su gobierno.
En lo que corresponde a nuestro estado, será importante que el gobierno que preside Marco Mena, tome las medidas convenientes y preventivas, ya que si bien en Tlaxcala hasta el momento no hay algún caso confirmado, nuestra cercanía con nuestro vecino estado de Puebla y algunos estados circunvecinos donde ya está confirmado este mal, prende los focos rojos, el gobernador en tres años de gobierno se ha caracterizado por darle prioridad a la educación y la salud, de ahí que ojalá tome medidas como el gobernador de Jalisco, quien no espero lineamientos federales, para reunirse con su gabinete y tomar medidas, para prevenir y proteger a sus gobernados. Tlaxcala por su tamaño territorial, puede implementar medidas para proteger a la ciudadanía, principalmente en las escuelas, y en los lugares donde hay más congregación de personas, toca ahora a los trabajadores del sector salud, trabajar y cooperar en las estrategias y políticas públicas que se implementen para hacerle frente al coronavirus, que ojalá no llegue a nuestro estado.
Por cierto, hablando de salud, el sindicato que preside Blanca Águila, levantó el plantón que tenía frente a palacio de gobierno, una vez que el gobierno anunció la salida de la directora administrativa de SESA: Guadalupe Zamora, quien según el comunicado oficial pasó a los CECYTES, donde ya la cuestionaron, y no ha de ser por su buen trabajo, pero bueno, ahora será importante saber que tan deteriorada quedó la relación entre el gobierno del estado y el sindicato de SESA, ¿Por qué digo esto?, porque el sindicato de SESA, se ha caracterizado por ser un aliado del partido del gobernador Marco Mena, y a un año de que los partidos den las candidaturas, las diputaciones locales, diputaciones federales, presidencias municipales y presidencias auxiliares, la factura puede ser cobrada , más cuando Blanca Águila, ya va para fuera, pues según sus tiempos en unos meses termina su gestión como líder de SESA, entonces ¿Quién ganó y quién perdió?.
El próximo, miércoles algunos comentarios de los cambios en USET-SEPE, y de la elección de la Sección 31 del SNTE.