- Además, los restos óseos hallados en el interior de una bolsa junto al cadáver, no corresponden a un ser humano.
Resultado de diferentes pruebas y técnicas científicas a cargo del grupo de expertos forenses de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se determinó que la persona del sexo femenino que fue encontrada sin vida en el cauce del Río Atoyac, en el municipio de Nativitas, pereció a causa de una asfixia mecánica por sumersión completa en agua, de acuerdo con la diligencias de necropsia.
Luego de una minuciosa exploración física, se constató que el cadáver no cuenta con lesiones recientes provocadas por terceras personas, tales como contusiones, heridas cortantes e incluso por arma de fuego o marcas por sometimiento, lucha o forcejeo.
En cuanto a los restos óseos localizados dentro de una bolsa junto al cadáver, se verificó y corroboró que de acuerdo a las dimensiones y morfología anatómica no corresponden a las de un ser humano, por lo que se someterán a diversos estudios para verificar a qué tipo de especie animal pertenecen.
Aunado a esto, los Servicios Periciales trabajan para establecer y corroborar la forma cronológica del deceso.
Lo anterior, tras el reporte la tarde del 11 de septiembre, de la presencia de un cuerpo sin vida en el interior del cauce del Río Atoyac, a la altura de la población de San Rafael Tenanyecac, en el municipio de Nativitas.
Desde el momento de la notificación, oficiales de la Policía de Investigación y peritos en distintas ramas se trasladaron al lugar de los hechos, donde en primera instancia, y de acuerdo a las características en las que fue encontrado el cadáver, se activaron los protocolos para investigar los hechos como un homicidio doloso; sin embargo, tras los resultados periciales se descartó este delito.
El cuerpo hasta el momento permanece en calidad de desconocido; existe una familia del estado de Puebla que podría tener un lazo consanguíneo con la hoy occisa, ya que proporcionaron señas particulares que coinciden con las del cadáver; sin embargo, se practicarán las pruebas genéticas necesarias que se compararán para confirmar o descartar un parentesco.
Con evidencia pericial, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), descarta que el fallecimiento de esta persona esté relacionado con hecho violento, por lo que la Carpeta de Investigación se integrará bajo el rubro de homicidio culposo.