En un Estado con más antros que librerías, diputada descubre la magia de la lectura

Rosa Acosta

Como una clase muy aburrida de historia, diputada María Bertha Mastranzo del movimiento de regeneración nacional manifiesta la importancia de fomentar la lectura y la importancia de las bibliotecas mientras todos los diputados estaban cada quien por su lado.

Establece las circunstancias para llegar al punto mencionando a José Vasconcelos con su proyecto bibliotecario como de los más extensos e importantes de México, concibiendo a las bibliotecas como un elemento primordial para el desarrollo del país, la secretaria de educación pública, la secretaría de cultura, así hasta llegar al día de hoy para retomar las estadísticas que todos saben y a nadie importan, los mexicanos leen menos de 3 libros al año y consumen 3 horas a la semana en lectura.

Menciona que el uno de los problemas es la falta de acceso a los materiales producidos por las leyes de derechos de autor. Derivado de esto hace mención del tratado de Marrakech que permite la producción de obras accesibles a personas con discapacidad visual generando un cambio fundamental en el acceso a la información.

Corresponde ahora al estado promover políticas que fomenten el derecho a la lectura, las pocas bibliotecas en el estado -cuando no se están remodelando- representan un núcleo de conocimiento, almacenando información. Continúa comentando la importancia en el estado de lectores que acudan a las bibliotecas a desarrollarse en las ciencias, el arte y la cultura.

Quedando muy coqueto su discurso si tan solo le hubieran puesto atención sus compañeros diputados en lugar de platicar entre ellos y pasarse de un asiento a otro o hipnotizados por sus celulares móviles.

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