Roberto Nava Briones
De manera infrahumana trata la dirigencia estatal de la sección 31 del SNTE que preside Demetrio Rivas Corona, a miles de jubilados y pensionados -muchos con problemas de salud y algunos con visible incapacidad-, quienes tuvieron que permanecer por varias horas bajo los rayos del inclemente sol para poder recibir un bono de fin de año de un mil 550 pesos mismo que a muchos ya no les fue entregado porque al personal del sindicato ya no le dio tiempo entregar.
Fue desde el pasado martes y hoy miércoles cuando maestros jubilados de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) tuvieron que esperar por varias horas bajo los rayos del sol y exponer su integridad física para poder cobrar su bono navideño.
A la dirigencia de la sección 31 del SNTE no le importó que docentes en sillas de ruedas, o con enfermedades crónico degenerativas y con algunas limitantes fisicas, tuvieran que permanecer por varias horas olvidados en la calle y hasta que se les antojó darles el bono que el Gobierno del Estado destinó para ese gremio.
Tal situación provocó inconformidades entre los jubilados quienes lamentaron que su dirigente no haya previsto entregar el apoyo en un lugar adecuado para tal fin; “al profe Demetrio le preocupa mas quedar bien con todo mundo, que en ofrecer trato digno a quienes dejamos nuestra vida en las aulas”.
“El profe anda más ocupado en la grilla que en ofrecer trato digno a nosotros…verguenza debería tener si nada de lo que hace le sale, quiso quitar a la Jefa del Departamento de Técnicas y no pudo, peleó los pavos y tampoco logró que se los dieran a los compañeros, mejor debería dedicarse a otra cosa porque con el maestro J Carmen Corona eso no pasaba”.
Algunos de los inconformes lamentaron la insensibilidad y falta de organización de la actual dirigencia sindical por lo que no les queda de otra que esperar a una nueva convocatoria para recibir el bono ya que el horario establecido por el mismo SNTE fue insuficiente para entregar los apoyos.