Brissa Montero
Uno de los aspectos por los que se distinguió la administración de Francisco Román Sánchez, fue por que siempre se dio tiempo para atender a todas las personas que se acercaban a él, para solicitarle algún apoyo; Principalmente por cuestiones de salud.
Tal como lo mencionó alguna vez y de lo cual existen evidencias es que “ninguna de esas personas fue ignorada”, no eran asignados a hablar con el secretario del secretario para poder llegar al entonces Presidente Municipal, quien de manera personal las atendía. Incluso algunas veces debido a su ausencia, había instrucciones giradas de atender a todas las personas que le buscaban.
Una muestra de ello, es el niño Gerardito, quien el pasado domingo pidió a su familia que lo llevaran a la reunión que sostuvo con simpatizantes de la CCCD, porque según lo expresó: “Quiero saludar a mi amigo Francisco”.
Cuando Gerardito fue llevado al lado de Francisco Román a quien saludó con mucho cariño y más cuando se enteraron del porqué nació ese sentimiento.
Gerardito, un niño normal con una pequeña afección al corazón, cayó desvanecido un día en el patio de su escuela.
El niño necesitaba oxígeno, sin embargo nadie sabía que hacer por lo que lo único que acertaron a hacer fue a presionarle el estómago.
Desafortunadamente las escuelas no cuentan con equipo, ni los maestros con los conocimientos para saber que hacer.
Narra la madre del pequeño, que sin conocerlos Francisco Román les brindó todo su apoyo y que gracias a él, a pesar de las secuelas como lo es perder la vista y sufrir parálisis cerebral, hoy su niño vive y es un niño feliz a pesar de todo.
– “¿Cómo no agradecerle a quien no te conoce y te brinda su apoyo, a quien te acompaña en el hospital y está pendiente de tus necesidades?-.
Fueron unas de las emotivas palabras de una madre que sabe que la vida de su hijo aún continúa gracias al apoyo de alguien que como lo dijo con un gran agradecimiento en su mirada, ya que tal como lo mencionó, recibió el apoyo de Francisco Román quien le ofreció su ayuda sin importar lo que ello representará.
Luego de meses en los que les daban pocas esperanzas de vida, las ganas de vivir de Gerardito se impusieron, pues a pesar de su corta edad, tuvo la fortaleza y la fe para lograrlo.
– “Esto -mencionó Francisco Román- No hubiera sucedido si la Ley de Salud hiciera obligatorio el que se hicieran exámenes a todos aquellos niños que muchas veces lo precario de la economía no permite a los padres solventarlo”-.
– “La historia de Gerardito no puede repetirse, tenemos la obligación de prevenir que suceda, Es necesario que además los maestros se capaciten para poder reaccionar ante alguna eventualidad y que las instituciones tengan el equipo necesario para evitarlo”- Concluyó Francisco Román Sánchez.
La historia no termina ahí, ya que gracias a la gestión de Francisco Román, hoy Gerardito se reintegra a la sociedad, ya va a la escuela y aprende de prisa, además es propietario de una tienda de abarrotes al ser beneficiado con un proyecto productivo por 300 mil pesos, que le permite ayudar a solventar sus propios gastos a su familia que reconoce el apoyo del Líder Nacional de la CCCD.
Y Gerardito todos los días supervisa su propio negocio cuando pide a sus padres o abuelo que lo lleven al “Abarrote de Gerardito”.