Roberto Nava Briones
En el Ayuntamiento de Zacatelco desde el alcalde así como los integrantes del cabido cobran jugosos salarios, mismos que se aumentaron a su llegada sin incluir otras percepciones que de forma discrecional perciben con la finalidad de que los zacatelquenses no se enteren los exorbitantes sueldos que perciben.
Para el caso del alcalde, tiene un sueldo mensual de 72 mil 270 pesos, mientras que la síndica municipal percibe un salario mensual de 49 mil 500 pesos y cada uno de los regidores tiene asignado un salario de 31 mil 050 pesos al mes con la inminente finalidad de quedarse callad@s ante todas las irregularidades.
De acuerdo a la nómina que el municipio entregó al Órgano de Fiscalización Superior (OFS) y al Congreso local, las cantidades que reciben los presidentes de comunidad no fueron reflejadas en el tabulador de sueldos del ejercicio 2017.
Tampoco incluyen los nombres de quienes perciben los recursos públicos en ese municipio gobernado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Cabe hacer mención que las cantidades arriba citadas, no incluyen alguna percepción adicional que se presume tienen como apoyos de viáticos, gasolina, teléfono celular y gastos diversos entre otros, que le son cargados al municipio sureño.
Otros funcionarios que también cobran jugosos salarios, son la Secretaria del Ayuntamiento Maribel Juárez a quien le asignaron 30 mil 630 pesos al mes como salario, funcionaria quien es recordada en el Congreso local ya que durante la pasada Legislatura cobraba sin trabajar en el Poder Legislativo y además, fungía como Presidenta de la Cruz Roja de Zacatelco.
Entre los mejores pagados en ese municipio sureño, se encuentran l@s regidores quienes cobran la modesta cantidad de 31 mil 050 pesos al mes.
Se presume que gozan de jugoso salario con tal de tapar las corruptelas y además ser cómplices del alcalde quien en los casi nueve meses de gobierno solo atina a reírse de todo, después de que no ha logrado atender las demandas de sus gobernados.
Incluso ha sido exhibido de andar en cuanto evento puede aunque lo han echado de alguno de ellos por considerarlo persona non grata.